Oración y Evangelio 20250506

PADRE DE BONDAD

     Al comenzar este día, te doy gracias por el don de tu Palabra que, como el maná en el desierto, renueva mi esperanza. La gente pidió a Jesús señales, un pan que calmara su hambre fugaz, pero Él reveló el verdadero alimento: su vida entregada por el mundo. Reconozco que, a veces busco respuestas inmediatas, éxitos visibles o seguridades terrenales, olvidando que solo Tú sacias el alma. Jesús, Pan de Vida, despierta en mi hambre de creer en Ti, confiar en tu camino y hallar en cada instante la fuerza de tu presencia.

     Enséñame a acudir a Ti en mis decisiones, mis trabajos y mis relaciones, sabiendo que eres el sustento que nunca se agota. Que cada palabra, gesto o esfuerzo brote de la certeza de que, al creer en Ti, ya no habrá vacío que me derrote. Conviérteme en testigo de tu amor, para que, al compartir el pan material, también lleve a otros a descubrirte como el alimento eterno.

AMÉN.

BUENOS DÍAS.

FELIZ Y BENDECIDO MARTES.

Oración 

¿Por qué estoy abatido? ¿Por qué estoy tan turbado? En Dios pondré mi esperanza, no cesaré de alabarlo, ¡él es mi Dios salvador!

SALMOS 42:12 

EvDH:”Jesús respondió: "Les aseguro que no es Moisés el que les dio el pan del cielo; mi Padre les da el verdadero pan del cielo;

porque el pan de Dios es el que desciende del cielo y da Vida al mundo".

Ellos le dijeron: "Señor, danos siempre de ese pan".

Jesús les respondió: "Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed.”

En la oración del Padre Nuestro que Jesús nos enseñó, dos veces aparece la palabra “nuestro”, una con respecto al Padre y la otra con respecto al pan. 

Queda clara en la oración, nuestra misión, que a través de recibir y conocer a Jesús, las personas descubran al Padre, su Amor, su Misericordia y sus planes . 

Y también vivan el regalo de encontrar a Jesús como el Pan que ha bajado del cielo por nosotros y para nosotros. 

Que tengamos en nuestro corazón, guiados por el Espíritu Santo, la misión de lograr la justicia y la equidad en la repartición del pan y el alimento para el hambre de la humanidad.

Pedimos confiadamente al Espíritu Santo nos enseñe a descubrir y agradecer el Pan del cielo que es Jesus, y que bendiga nuestra misión, para llevar el pan y el alimento a los que lo necesitan, que con su sabiduría nos una y reúna para este Servicio.