Oración y Evangelio 20250301

MADRE MARÍA

     En este día en que se te honra, enséñame a recibir el Reino como un niño: con manos vacías, corazón confiado y esa pureza que refleja tu «sí» eterno.

     Que hoy, al imitar tu humildad, no impida a nadie acercarse a Jesús, sino que, como Él, abrace a los pequeños, a los frágiles, a los que el mundo ignora.

     Virgen de la ternura, que llevaste a Cristo en tus brazos, bendice a las familias, a los niños sin voz, y llévalos ante el Padre.

     Que este sábado, bajo tu manto, cada gesto sencillo: una sonrisa, un servicio, sea semilla del Reino que no se marchita.

AMÉN.

BUENOS DÍAS.

FELIZ Y BENDECIDO SÁBADO.

ORACIÓN 

Vayan, pues, y hagan discípulos a los habitantes de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo,

MATEO 28:19 

EvDH:”Le trajeron entonces a unos niños para que los tocara, pero los discípulos los reprendieron.

Al ver esto, Jesús se enojó y les dijo: 

"Dejen que los niños se acerquen a mí y no se lo impidan, porque el Reino de Dios pertenece a los que son como ellos.

Les aseguro que el que no recibe el Reino de Dios como un niño, no entrará en él".

Después los abrazó y los bendijo, imponiéndoles las manos.”

Hoy nos fijamos en las acciones más que en las afirmaciones, (que por cierto… no son menores).

Una vez más, y las que sean necesarias toca resaltar el hecho, y la acción, de que le TRAJERON a unos niños. 

San Marcos ha sido muy insistente en el tema de traerle a Jesús toda clase de personas, de enfermos, y ahora es el turno de los niños.

El tema de la niñez no ha sido de fácil manejo para una generación adulta con tantos daños como la nuestra. Por lo que es más fácil poner reglas, horarios, y obstáculos, que procurar acercamientos, contacto y conocimiento con una nueva generación que tiene el derecho y la necesidad de encontrarse con Jesús. 

Y es el mismo Jesús quién exige que se los traigan y que no les pongan impedimentos, no solo en el encuentro, sino también en la permanencia.

En el mundo de la sicología se dice que aquellos familiares que no tienen contacto físico con sus niños, (hablo de jugar, de tirarse al suelo al nivel de ellos, de abrazarlos como custodios llenos de amor) pueden terminar siendo candidatos a ser depredadores de estos pequeños. Sin generalizar, puede que este sea un síntoma a tomar en cuenta, en especial después de miles de niños abusados en el seno de la Iglesia.

Por eso no es menor leer que Jesús “los abrazó y los bendijo, imponiéndoles las manos”. Se vale usar la imaginación para pensar en Jesús abrazándolos, (los mismos discípulos se habrán sorprendido de más, y puede que hasta un poco de envidia hayan sentido). Por otro lado no es con cualquiera que los niños se dejan abrazar a la primera, y Jesús pasaba ese filtro sin problema.

Hoy damos gracias al Cielo por aquellas personas en la Iglesia con el llamado especial a reavivar y mantener la pastoral con el maravilloso mundo de la niñez, con todo los retos que conlleva en todas las áreas, internas y externas.

Y pedimos humildemente la sanidad de los hombres y mujeres a los que en su niñez sufrieron algún daño o herida en su cuerpo y dignidad.

Hoy pedimos al Espíritu Santo por ellos y por nosotros, pedimos para todos que HOY nos dejemos abrazar y bendecir por Jesús, y que Él nos sane y nos ayude a ser custodios de la niñez que nos rodea, pues el Reino de Dios les pertenece.