Oración y Evangelio 20241203

Pues donde tengas tus riquezas, allí tendrás también el corazón.
MATEO 6:21

EvDH: “En aquel momento Jesús se estremeció de gozo, movido por el Espíritu Santo, y dijo: 
"Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así lo has querido.
Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre, como nadie sabe quién es el Padre, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar".
En un breve pasaje nos enseñan como Los Tres: Padre, Hijo, y Espíritu Santo, se suman para darnos esta enseñanza.
No es un dato más que el escritor (que es San Lucas) deje en claro que no solo son hermosas y profundas palabras de Jesús, sino que Jesús se estremece de Gozo, y Quién lo mueve a decir estas palabras al Padre es El Espíritu Santo. 
Queda claro que es El Padre quien revela sus riquezas a los más pequeños, y que si decimos conocer a Jesús es porque el Padre así lo ha querido, y que por conocer a Jesús llegamos a descubrir AL PADRE y todo el Amor que nos tiene.
Esta es una revelación que no tiene fin pues es y será siempre un descubrimiento, se trata de una RELACIÓN total, en donde, con toda Alegría, cada PERSONA de la TRINIDAD, hace que descubramos a los Otros Dos. 
Hoy pedimos al Espíritu Santo que también nos conmueva y nos mueva con su Gozo, con su Fortaleza y nos dé el Don de, desde esa Alegría, ayudar al Padre a llevar la noticia de Jesús a muchos siempre.

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