Oración y Evangelio 20250531
QUERIDO PADRE Al comenzar este día, guía mis pasos para llevar tu amor a quienes más lo necesitan, como María lo hizo con Isabel. Que en mi trabajo, familia o encuentros, mi vida refleje tu bondad. Ayúdame a reconocer tu gracia en lo pequeño: una palabra de aliento, un abrazo sanador o la alegría de servir sin esperar. Señor, como María proclamó tus obras grandes en los humildes, hoy confío en que miras mi pequeñez. Ante desafíos como proyectos difíciles o heridas por sanar, dame fe para creer que actúas en lo oculto. Que cada gesto sencillo glorifique tu nombre y recuerde que tu misericordia transforma lo cotidiano en eternidad. AMÉN. BUENOS DÍAS. FELIZ Y BENDECIDO SÁBADO. OREMOS Porque el Señor es bueno, su bondad perdura por siempre, su fidelidad por generaciones. SALMOS 100:5 EvDH:”Su Misericordia se extiende de generación en generación sobre aquellos que lo temen. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los soberbios de c...