Oración y Evangelio 20241119
Mi mandamiento es este: que se amen los unos a los otros como yo los he amado.
JUAN 15:12
EvDH:”Y Jesús le dijo: "Hoy ha llegado la salvación a esta casa, ya que también este hombre es un hijo de Abraham, porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que estaba perdido".
Una misiva que suele quedar tristemente implícita para algunos en la ecuación de compartir y llevar la Acción y la noticia del Evangelio, es la de hacerlo sin mezclarse, hacerlo sin “rebajarse” al contacto, hacerlo con sana distancia por miedo al contagio.
El chisme era que Jesús se había alojado y hospedado en casa de un pecador, por cierto, de muy mala fama en la zona. En otros pasajes se comenta que comía con los pecadores, lo que implicaba compartir, conversar, escuchar, estar.
Hoy pareciera que debemos intentar una evangelización a control remoto, prácticamente virtual, pues a la menor cercanía que logremos, no faltará la sección de la Iglesia que critique condenatoriamente el hecho. Nos quedamos con la idea de que “deben venir” y dejamos intacta la orden directa de ir, de llegar, de alcanzar, de salir.
Para encontrar lo que estaba perdido hay que hacer una muy buena búsqueda, esculcar, y hasta agacharse para estar ciertos de dónde puede estar.
Hoy pidamos al Espíritu que nos regale el poder ser testigos de cómo la Salvación llega hasta la casa de tantos que la están buscando y esperando. Que nos ayude a dar el testimonio de como La Salvación llegó a nuestra casa y desde ahí todo ha sido diferente y para bien.
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