Oración y Evangelio 20240420
No cesen de orar.
1 TESALONICENSES 5:17
Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de Vida eterna. Nosotros hemos creído y sabemos que eres el Santo de Dios".
La confesión de Fe de Simón Pedro es total, porque se hace desde la fragilidad, sin esconderla. Pero reconociendo la dimensión de la grandeza espiritual de Jesús. Ya el Ángel le había adelantado a María, nuestra Madre, este título divino de Jesús: “Por eso el Santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios”(Lucas 1,35)
Hasta los mismos demonios reconocían este título total de Jesús: “¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido para acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios”(Marcos 1,24)
Tanto el Ángel como el demonio lo decían con conocimiento de causa. Pero Simón Pedro, lo dice porque El Padre se lo revela y El Espíritu lo lleva a decirlo. Nos podemos quedar buscando mil palabras para explicar esto, pero lo resumimos en que Jesús es el Hijo de Dios Vivo. (Y confesarlo en voz alta en esa época y cultura era una total blasfemia que conllevaba sentencia de muerte)
Pedro dice (en plural por cierto) “hemos creído”, hemos dado ese paso de fe por decisión propia, nuestra Fe hoy llega a eso. Pero además dice, “sabemos”, eso no se recibe por lectura, decreto o contagio. Es saber, es conocer, es estar ciertos.
No hay otra puerta, ni otro Dador de Vida Eterna, y los discípulos que lo escuchaban siempre habían llegado a saberlo, a vivirlo y a amarlo. Sabían que no había ni a dónde, ni con quién más ir.
Pidamos con confianza al Espíritu Santo que nos ayude a siempre saber y creer en el Santo de Dios, en Jesús El Señor.
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