Oración y Evangelio 20230913

No se amolden a los criterios de este mundo; al contrario, déjense transformar y renueven su interior de tal manera que sepan apreciar lo que Dios quiere, es decir, lo bueno, lo que le es grato, lo perfecto.

ROMANOS 12:2 

EvDH:”¡Felices ustedes, cuando los hombres los odien, los excluyan, los insulten y los proscriban, considerándolos infames a causa del Hijo del hombre!

¡Alégrense y llénense de gozo en ese día, porque la recompensa de ustedes será grande en el cielo. De la misma manera los padres de ellos trataban a los profetas!

¡Ay de ustedes cuando todos los elogien! ¡De la misma manera los padres de ellos trataban a los falsos profetas!”

Ser profeta ya es un tema, un llamado, un ser vocero del Amor y de La Verdad.

Jesús deja un termómetro para estar ciertos si nuestro ser profeta es real o falso. La Verdad tiene el don de liberar, pero también el de estorbar a muchos, y si es el profeta el que la hace llegar y la anuncia, la reacción alérgica al mensaje se uno al profeta, pues insultos y ataques comienzan a ser parte del paisaje de todos los días.

Si todos nos elogian, algo no está en su lugar, no se trata de siempre estar en modo crítica, o denunciar por deporte. Se trata de vivir en coherencia con la verdad y proclamarla. Los elogios en sí no son malos, pero si son resultado de que no eres una amenaza para el mal y la mentira, entonces es falso lo que creemos, como lo creemos y somos falsos a la ora de profetizar.

Pidamos al Espíritu Santo el Don de ser Profetas, que Él nos enseñe y nos guíe a ser siempre fieles anunciantes de Evangelio, que seamos verdaderos profetas de la Verdad.