Oración y Evangelio 20221109

Ante todo, ámense entrañablemente unos a otros, pues el amor alcanza el perdón de los pecados por muchos que sean.

1 PEDRO 4:8 

EvDH:”Entonces los judíos le preguntaron: "¿Qué signo nos das para obrar así?".

Jesús les respondió: "Destruyan este templo y en tres días lo volveré a levantar".

Los judíos le dijeron: "Han sido necesarios cuarenta y seis años para construir este Templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días?".

Pero él se refería al templo de su cuerpo.”

En el contexto del pasaje, el inicio es la reacción de enojo de Jesús por hacer una casa de comercio de la Casa de Su Padre. 

Al final del pasaje deja en claro que Él es Templo también, un Templo que van a destruir, (no solo a echar a perder) pero que al final, al tercer día, se volverá a levantar. 

No había quién le entendiera semejante aseveración, incluso sus discípulos lo entendieron hasta después de su Resurrección.

Al final, si Jesús reacciona así por el templo de piedra en Jerusalén, ¡cómo reaccionará, en dolor y en enojo, cuando echamos a perder nuestro templo, nuestro cuerpo y ser entero!

Hoy pidamos confiadamente al Espíritu Santo el Don de limpiar nuestro templo interior siempre, en especial de todo aquello que le quite la dignidad y el derecho al Gozo del Cielo, que nos ayude y nos proteja. 

Pidámosle también que nos marque con la certeza de que algún día, como Él lo cumple en sí y lo promete para nosotros, nos levantaremos también como Hijos de La Resurrección.