Oración y Evangelio 20241002
Vigila atentamente tu interior, pues de él brotan fuentes de vida.
PROVERBIOS 4:23
será el más grande en el Reino de los Cielos.
El que recibe a uno de estos pequeños en mi Nombre, me recibe a mí mismo.”
La orden está dada.
El “cómo’ lograrlo es y será resultado de nuestro proceso diario con El Espíritu Santo.
Escuchando con atención las palabras de Jesús en nuestro corazón, pidamos al Ayudador del Cielo que nos haga pequeños, que nos dé y active en nosotros las bondades de un corazón de niño.
Que nos dé el Don de recibir, proteger, y amar a los más pequeños, pues según las palabras del Maestro, no es que lo representen, es que ¡Él está ahí!, en ellos, presente y real.
Que active en nuestro corazón las medidas del Reino de Dios y que eso guíe nuestros pasos en nuestra breve vida, que como los niños lo saben hacer, disfrutemos de la vida a cada momento.
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