Oración y 20241004

En cambio, el Espíritu produce amor, alegría, paz, tolerancia, amabilidad, bondad, lealtad, humildad y dominio de sí mismo. Ninguna ley existe en contra de todas estas cosas.
GÁLATAS 5:22-23


EvDH:”El que los escucha a ustedes, me escucha a mí; el que los rechaza a ustedes, me rechaza a mí; y el que me rechaza, rechaza a aquel que me envió".
Las palabras de Jesús son aclaratorias y tranquilizantes. 
No somos el mensaje, somos los mensajeros, y nos toca anunciar. 
El esperar que a todo mundo le guste nuestra noticia es ingenuo, de hecho no va a ser así. Y por el contexto del pasaje, más vale una ‘no aceptación’ evidente, que un “parece que sí”, pero incoherente.
Queda en lo dicho por el Maestro, no tomarlo personal, y hacer nuestra parte, además de no dar por perdido a nadie, pues no pocas veces el proceso de muchos no es inmediato, y de rechazarlo al final terminan escuchando la Voz del Maestro.
Que El Espíritu Santo nos guíe y ayude a saber que somos enviados, que nos enseñe, todos los días, a escuchar Su Voz, para poder transmitirla a muchos.

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