Oración y Evangelio 20231119
Medita día y noche el libro de esta ley teniéndolo siempre en tus labios; si obras en todo conforme a lo que se prescribe en él, prosperarás y tendrás éxito en todo cuanto emprendas.
JOSUÉ 1:8
EvDH:”Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses.
Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez,
porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más,
pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene.
En la enseñanza, llama la atención que sea el que menos tenía que perder, justo el que no arriesga, no invierte, no cree.
Se termina de hundir con su discurso de disculpa, al reconocer que el Dueño de los bienes alcanza lo que quiere hasta donde no colocó inversión.
Por eso la última frase se logra ubicar en el contexto.
Pues va más allá de solo darle al que tiene; se le da al que saber tener, al que lo multiplica, al que lo valora al punto de invertirlo y compartirlo.
Cualquier buen inversionista, le quitaría lo dado a aquel de sus empleados que no retribuya, que no logre multiplicar lo dado, que no muestre ganancias. Trasládese todo esto al tema de la fe y lo integral de ella en nuestras vidas y nuestra misión.
“Haz la prueba y ve qué bueno es el Señor” Salmo 34,8
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