Oración y Evangelio 20230131

Jesús los miró y les dijo: — Para los seres humanos es imposible, pero para Dios todo es posible.

MATEO 19:26 

EvDH:”Jesús preguntó: “ ¿Quién tocó mi manto?".

Sus discípulos le dijeron: "¿Ves que la gente te aprieta por todas partes y preguntas quién te ha tocado?".

Pero él seguía mirando a su alrededor, para ver quién había sido.

Entonces la mujer, muy asustada y temblando, porque sabía bien lo que le había ocurrido, fue a arrojarse a sus pies y le confesó toda la verdad.

Jesús le dijo: "Hija, tu fe te ha salvado. 

Vete en paz, y queda curada de tu enfermedad".

Jesús conoce a cabalidad la historia de cada uno de nosotros, hechos, consecuencias y situaciones. 

Cuando habla con esta Mujer llama la atención de que le diga “Hija”, (en el Nuevo Testamento es la única vez documentada que se lo dice a alguien).

Estamos claros de que la sanó de sus hemorragias, pero al decirle “Hija” Jesús llega más lejos, llega hasta donde esta Mujer se ha sentido huérfana, sin nadie que la proteja o la cuide. Jesús le habla a la mujer, a la joven, y a la niña que ahora se está sanando, y con sus palabras y miradas la abraza y la sana.

Hoy Jesús responde a nuestra simple y pobre oración, que apenas puede tocarle la orilla de su Manto. Y viéndonos a los ojos nos dice Hija, Hijo, tu fe te ha salvado. 

Pidamos al Espíritu Santo que nos ayude a tocar a Jesús para que Él nos sane completamente.