Oración y Evangelio 20221229

¿Por qué estoy abatido? ¿Por qué estoy tan turbado? En Dios pondré mi esperanza, no cesaré de alabarlo, ¡él es mi Dios salvador!
SALMOS 42:12 

EvDH:”Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, que era justo y piadoso, y esperaba el consuelo de Israel. El Espíritu Santo estaba en él
y le había revelado que no moriría antes de ver al Mesías del Señor.
Conducido por el mismo Espíritu, fue al Templo, y cuando los padres de Jesús llevaron al niño para cumplir con él las prescripciones de la Ley,
Simeón lo tomó en sus brazos y alabó a Dios, diciendo:
"Ahora, Señor, puedes dejar que tu servidor muera en paz, como lo has prometido,
porque mis ojos han visto la salvación
que preparaste delante de todos los pueblos:
luz para iluminar a las naciones paganas y gloria de tu pueblo Israel".
Hagamos nuestra la oración de Simeón, no solo en el tema de morir en paz, más allá, que se nos permita, y que podamos ver la salvación, que Dios nos ha preparado en Jesús. 
La muerte es inevitable, morir en paz es otra historia. 
La salvación es Jesús, y nos toca anunciarlo para que muchos, antes de partir puedan decir que han visto la salvación de Dios. Que han aceptado a Jesús como su Salvador personal.
Seguimos en tiempo de Navidad, y este regalo no tiene caducidad

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