Oración y Evangelio 20230305
EvDH:”Todavía estaba (Pedro) hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y se oyó una voz que decía desde la nube:
"Este es mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta mi predilección: escúchenlo".
Al oír esto, los discípulos cayeron con el rostro en tierra, llenos de temor.
Jesús se acercó a ellos y, tocándolos, les dijo: "Levántense, no tengan miedo".
La parte visual de este momento supera lo que se pueda pensar o imaginar.
Una cosa es que haya luces, y otra es estar en frente y rodeados de fuente de LA LUZ.
La parafernalia celestial, más los personajes nombrados, son suma suficiente para que esto quede marcado en la memoria del alma para siempre.
Por lo que llama la atención que EL PADRE, al hablar, y al hablar de Jesús y describirlo, diga en medio de todo eso ESCÚCHENLO.
Habrá muy disimiles momentos espirituales en nuestro caminar, de lucha, de prueba, de luz y transfiguración, pero la orden es la misma para todo el camino: ¡Escúchenlo!. Escribe Pablo que “la fe viene de la predicación, y la predicación, por la Palabra de Cristo”.
Pidamos al Espíritu Santo poder escucharlo y ser instrumentos para que muchos Lo escuchen.
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