Oración y Evangelio 20230326

Por eso me satisface soportar por Cristo flaquezas, ultrajes, dificultades, persecuciones y angustias, ya que, cuando me siento débil, es cuando más fuerte soy.

2 CORINTIOS 12:10

EvDH:”Y Jesús lloró. (Juan 11,35)

Aunque el pasaje encierra más riquezas: la resurrección de Lázaro, la confrontación sincera de Marta con Jesús, y la afirmación total de Jesús al decir Yo Soy La Resurrección.

Hoy nos quedamos con este pequeño versículo (algunos afirman que el más pequeño del NT) donde dice: “Jesús lloró”.

Queda claro que no era un llorón. 

Pero asombra verlo conmoverse hasta las lágrimas. 

Él, al ser uno de nosotros, sabía lo que sentimos al perder a un ser amado, y pudo experimentar en carne propia, como un duelo desata otros que guardábamos en nuestra alma. El contexto de su vida en ese momento ya lo preparaba para ofrecer su vida por nosotros.

Hoy, sabiendo que Él nos entiende y nos ama, pedimos al Espíritu Santo que reciba nuestras lágrimas… de cansancio, de dolor, de impotencia, de miedo.

Hoy recordamos y hacemos nuestras sus palabras: “Dichosos los que lloran, porque serán consolados.” Al final de todas las lágrimas, está La Resurrección.