Oración y Evangelio 20230416

Jesús entonces le dijo: — Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá; y ninguno de los que viven y tienen fe en mi morirá para siempre. ¿Crees esto?
JUAN 11:25-26 
EvDH:”Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio de ellos y les dijo: "¡La paz esté con ustedes!".
Luego dijo a Tomás: "Trae aquí tu dedo: aquí están mis manos. Acerca tu mano: Métela en mi costado. En adelante no seas incrédulo, sino hombre de fe".
Tomas respondió: "¡Señor mío y Dios mío!".
Jesús le dijo: "Ahora crees, porque me has visto. ¡Felices los que creen sin haber visto!".
En este pasaje Jesús nos felicita, nos dice ¡FELICES! En este pasaje nos nombran, nos mandan a decir que estamos en la lista de los bendecidos.
Más que simple incredulidad, en Tomás seguimos viendo el síntoma de no querer creer a los que lo han visto, de sentir que se pierde un privilegio (que de por sí no hay) frente a los otros que sí lo vieron.
De Tomás toca aprender, él ya había sido nombrado un par de veces. 
Una en la que dice vamos también nosotros a morir con Él (Juan 11,16) y otra en la que le pregunta a Jesús ¿cómo podemos saber el camino? (Juan 14,5)
No cabe duda de que Tomás habló de más en su momento, pero la escuela nos queda a todos… y hoy su confesión de Fe es parte de nuestra máxima Celebración… ¡SEÑOR MÍO, Y DIOS MÍO!
Pidamos al Espíritu Santo que nos haga y nos afirme como hombres y mujeres de Fe, que nos sane y nos libere de cualquier excusa y raíz para no creer en Él o en sus profetas (o sea, aquellos que anuncian la Buena Nueva)

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