Oración y Evangelio 20230604
En cambio, el Espíritu produce amor, alegría, paz, tolerancia, amabilidad, bondad, lealtad, humildad y dominio de sí mismo. Ninguna ley existe en contra de todas estas cosas.
GÁLATAS 5:22-23
EvDH:”Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna.”
El Amor de Dios no se entiende, se acepta.
No se gana, se recibe.
No es un premio, es Su regalo.
Tanto, de tal manera y forma… en fin, no hay forma de condensarlo.
Nos toca entonces, aceptar ese Amor, dejarnos amar, y saber que eso nos encamina hacia la Vida Eterna, librándonos de la total oscuridad sin Dios, sin Amor.
Pidamos con confianza al Espíritu Santo que este pasaje sea vida y realidad en nuestras vidas, para que podamos llevarle la noticia y la certeza a tantos que hoy necesitan saber que Dios los Ama, y que su más grande prueba de Amor es Jesús, Su Único Hijo.
Comentarios
Publicar un comentario